Al momento stai visualizzando Meditación A.B. Simpson: 12 DE MAYO

Meditación A.B. Simpson: 12 DE MAYO

Hazme saber, oh tú a quien ama mi alma, Dónde apacientas, dónde sesteas al mediodía;
Pues ¿por qué había de estar yo como errante Junto a los rebaños de tus compañeros?
Cantares 1:7

Amado (a) ¿no anhelas los quietos y privados lugares del Señor, la sombra del Omnipotente, el secreto de su presencia? Puede ser que tu vida sea un ir y venir, un correr sin parar, siempre haciendo algo, con el tiempo alcanzado, o quizás un esfuerzo interminable, pero sin llegar a la meta.

¡Anhelas descansar! Anhelas recostarte cual el apóstol Juan cerca de su corazón, sabiendo que tienes todo en Él, que toda consulta tendrá su respuesta, que toda duda se disipará, que todos tus intereses estarán a salvo, que cada oración se responderá, que todo deseo será satisfecho. Levanta tu voz amado (a). Cuéntame, amor de mi vida, ¿Dónde apacientas tus rebaños? ¿Dónde a la hora de la siesta los haces reposar?

¡Bendito sea su nombre! Él tiene para nosotros su amor exclusivo. Este amor lo siente cada individuo como para él mismo, un lugar donde él solamente puede recostar su cabeza y nadie le disputa ese lugar. Igual, el corazón de nuestro Señor es tal que acoge a miles de millones en su regazo, y cada corazón piensa poseerlo para sí mismo. Es como las miles de pozas de agua en la playa que reflejan el sol y pareciera que cada poza tiene al sol cautivado en su preciosa profundidad. Cristo nos puede enseñar este secreto de Su más profundo amor.

MEDITEMOS Y OREMOS

Días del Cielo sobre la Tierra
Siguenos y comparte: