El amor todo lo cree.
1ª. Corintios 13:7
Hay una preciosa expresión en el libro de Isaías que refleja agudamente la profundidad del amor de Dios hacia nosotros. Él dice: Porque dijo: Ciertamente mi pueblo son, hijos que no mienten; y fue su Salvador. (Isaías 63:8)
El pueblo de Israel mintió, pero el Señor no lo creyó. Por lo menos Él habla aquí como que no lo creía, en la grandeza de su amor, porque eran su pueblo. Él no ha visto la iniquidad de Jacob o la perversidad de Israel. Hay mucho de ello que ver, y el diablo lo ve todo, y mucha gente está contenta con verlo, pero nuestro Padre no lo ve. Él lo cubre con su amor y con la preciosa sangre expiatoria de su Hijo Jesús.
Tan grande amor debería hacernos más generosos de espíritu hacia otros y ansiosos de que nuestro Padre no tenga que cubrir tanto sus ojos debido a nuestras propias imperfecciones y faltas.
Si tenemos la mente y corazón de Cristo, vestiremos aun al no cristiano con la gracia con que la fe en Cristo lo puede vestir. Haremos todo lo posible por considerarlo realmente así, como cristiano, y con amor y con oraciones finalmente será así. El amor todo lo cree. (1ª. Corintios 13:7)
MEDITEMOS Y OREMOS
