Me gozaré en el Dios de mi salvación”
Habacuc 3.18 RV1960
El secreto de nuestro gozo es no esperar hasta que nos sintamos alegres, más bien es necesario ascender, a través de un acto de fe, más allá de la depresión que nos hunde y empezar a gozarnos y alabar al Señor como un acto de nuestra voluntad.
Esto es el significado de los siguientes versículos: Alégrense siempre en el Señor Insisto: ¡alégrense! (Filipenses 4.4). Por eso me alegro; es más, seguiré alegrándome (Filipenses 1.18). Hermanos míos, considérense muy dichosos cuando tengan que enfrentarse con diversas pruebas (Santiago 1.2). En cada una de estas instancias hay una evidente lucha con la tristeza y después el triunfo de la fe y la alabanza.
Esto en parte significa un sacrificio de alabanza’. Un sacrificio es algo que nos cuesta. Cuando acariciamos un rencor o maltrato y lo tenemos muy adentro, y lo nutrimos, pensando Constantemente en ello, y estamos muy dispuestos a gozarnos miserablemente y egoístamente murmurando -entonces si nos Cuesta romper su morboso encanto, levantarnos de nuestra auto” Conmiseración y en una sana y santa determinación decir me gozaré en el Dios de mi salvación (Habacuc 3.18) Y m consideraré dichoso al tener que enfrentarme a estas diversas pruebas. Pensando
Hebreos 13.15: “Así que ofrezcamos continuamente a Dios, por Medio de Jesucristo, un sacrificio de alabanza, es decir el fruto de los labios que confiesan su nombre.”
MEDITEMOS Y OREMOS
